En una entrevista de trabajo, tus gestos, tu actitud, tu voz, tu mirada pero también tu atuendo dicen en voz alta lo que estás susurrando. Para asegurarse de causar una buena impresión y evitar que su lenguaje corporal vaya en contra de la imagen que desea transmitir, ¡es mejor aprender a descifrarla!

El lenguaje corporal y, en términos más generales, la comunicación no verbal, transmite información sobre usted. Y aunque el reclutador se centrará más en tus palabras, la impresión general de tu perfil se basará en la imagen que retratas.Estos son nuestros consejos para lenguaje corporal en una entrevista de trabajo.

Da una buena primera impresión

Antes incluso de verte para una entrevista, el reclutador te da una primera impresión. Ya sea que tenga paciencia en la sala de recepción o que lo inviten a unirse al reclutador directamente en su oficina o en una habitación, se examinará la forma en que se levanta, camina hacia él y se presenta.

Evite levantarse demasiado rápido, cuide sus pasos y sea entusiasta cuando se presente y salude a la otra persona.

También preste atención al apretón de manos. Un gesto aparentemente inofensivo, el inevitable apretón de manos resulta muy revelador. Demasiado suave, dice que te falta energía y confianza, demasiado vivaz, es probable que pases por hiperactivo y demasiado fuerte, corres el riesgo de dañar las falanges de tu futuro gerente o de RR.HH., lo que no tampoco se recomienda …

El apretón de manos ideal consta de tres movimientos de vigor moderado y no debe exceder los tres segundos. Durante este, recuerde mirar a su interlocutor a los ojos, para indicar que está listo para entablar un diálogo, mientras muestra su mejor sonrisa.

Controla tu actitud

La actitud que adopte durante la entrevista refleja su estado de ánimo. Los brazos cruzados pueden significar encerrarse en uno mismo y traicionar una falta de confianza, como si estuviera tratando de protegerse. Tener el cuerpo hacia atrás y alejarse del reclutador también puede comunicar una imagen de retraimiento.

La mejor posición es tener la espalda recta, la cabeza erguida y el pecho ligeramente inclinado hacia adelante, para expresar su interés y hacerle saber al reclutador que está en la conversación, concentrado e interesado. Un consejo que surge con regularidad es anclar los pies al suelo para ganar estabilidad y, por tanto, confianza.

Soft Skills: Habilidades Laborales

¿La mirada, reflejo del alma?

Tu mirada también dice mucho de ti. Mantenga siempre contacto visual con su (s) interlocutor (es), sin mirarlos. Mirar a la distancia o mirar hacia abajo repetidamente puede reflejar miedo, vergüenza, una mentira o incluso un desinterés total en la entrevista.

Gestos y movimientos

Si estás cómodo y tranquilo, se sentirá a través de movimientos lentos y controlados, pero si de lo contrario estás ansioso o molesto, tus gestos serán espasmódicos, que el reclutador no dejará de observar.

Idealmente, evite jugar con las manos, el cabello, las joyas o un bolígrafo, y no se rasque. Estos gestos son sinónimo de ansiedad y pueden hacer que el reclutador se pregunte si está mintiendo u ocultando algo.

La voz del éxito

La entonación de tu voz, su timbre, el volumen o incluso el fluir son elementos en los que debes concentrarte.

Para hacer más atractivo tu discurso, no dudes en variar el ritmo, cambiar la entonación y adaptar el volumen, según las palabras que estés diciendo y la información que quieras enfatizar. Además, trate de tener una voz cálida y sonriente para transmitir su simpatía.

Hablando de sonreír, es contagioso, es decir que por imitación tendemos a reproducir lo que vemos. Si sonríe, su interlocutor tiene muchas posibilidades de sonreír también y el ambiente será aún más agradable.

5 señales de que tu entrevista de trabajo salió bien

El hábito casi hace que el monje

Si bien la ropa no es parte del lenguaje corporal en sí, es, como la actitud o los gestos, parte de los elementos que influyen en la percepción que el reclutador tiene de usted. Si está usando un traje de tres piezas a juego con zapatos encerados, no está enviando el mismo mensaje que si estuviera en un suéter-jeans-zapatillas. Cuando el primer caso puede retratarte como un perfeccionista, el segundo puede interpretarse como laxitud.

Los colores también son importantes y reflejan tu personalidad. Los tonos oscuros como el gris y el negro se asocian con la sobriedad y la elegancia, mientras que los colores más cálidos se refieren a una personalidad colorida y más extrovertida.

La elección del atuendo y los colores obviamente depende de la empresa que solicite y del puesto al que se dirige. No dude en buscar fotos de los empleados en el lugar de trabajo, para tomar la temperatura y elegir un código de vestimenta en consecuencia.

Sin embargo, todas estas recomendaciones deben tomarse con un grano de sal. El hecho de que cruzó los brazos durante la entrevista o miró hacia otro lado durante unos segundos no significa que el trabajo siempre se le pasará por debajo de la nariz. No todos los reclutadores son igualmente sensibles al lenguaje corporal. Estos son solo principios que es bueno respetar para poner las probabilidades a su favor.

Posturas en una entrevista de trabajo

No son solo tus palabras las que se analizan durante una entrevista de trabajo. Los reclutadores también lo evalúan por su actitud y su apariencia. Y ciertos gestos tienen el don de fastidiarlos. Keljob te ofrece las 10 mejores posturas que debes evitar.

Un suave apretón de manos

El primer contacto entre el candidato y el empleador, el apretón de manos, marca el tono de la entrevista. Ya revela una cierta personalidad: tímida, segura, pretenciosa o retraída . “El apretón de manos ideal es sencillo, sin recibir demasiado apoyo”, sugiere Julie Isabelle-Binon, fundadora de la firma de contratación Team RH. Cuidado con no tener las manos sudorosas o pegajosas, la impresión que dejaría sería desagradable … Un
gesto trivial pero a la vez mayúsculo, el apretón de manos ha sido incluso objeto de un estudio científico.

2 Brazos cruzados

“Un candidato sentado con los brazos cruzados está a la defensiva. Es un signo de retraimiento y protección . No está abierto a la discusión. Sin embargo, una entrevista de trabajo es ante todo un intercambio ”, afirma Stéphane Pille, director comercial de la empresa de contratación CHR Profil.

“Estos gestos no son paralizantes […], no son criterios de selección, pero sobre todo indicios de tu personalidad”.

3 Mano delante de la boca

Hablar con los dedos en los labios o la mano en oposición a la boca siempre atraerá al reclutador. “Este gesto refleja una cierta contradicción. El candidato probablemente mienta o, al menos, oculta la verdad ”, comenta Stéphane Pille.

4 La mirada furtiva o demasiado insistente

Todos los profesionales de la contratación te dirán: nada es peor que un candidato que huye del enfrentamiento. No es con la ventana o tus zapatos que tienes una cita. Esta actitud puede ofender a tu interlocutor, además de delatar una profunda vergüenza .
Por el contrario, tampoco se agradece mucho una mirada fija insistente . Traduce demasiada confianza e invierte el equilibrio de poder, que tiene el don de molestar a los reclutadores.

5 Cejas fruncidas

Tenga cuidado cuando frunza el ceño. Esto demuestra que no está de acuerdo con lo que dice su interlocutor. Usted desafía sus palabras usando su juicio de valor. Si, en ciertos casos, este espíritu crítico se ve bien, repetidamente, puede ofender al reclutador.

6 Codos en el escritorio

En la entrevista, el espacio reservado para el candidato se limita a la silla en la que está sentado. Sentirse cómodo en el escritorio del interlocutor puede resultar impactante. Incluso los codos no tienen cabida allí. “Un candidato que se asienta y invade el espacio personal de su interlocutor es percibido como una persona intrusa y un poco demasiado segura de sí misma”, comenta Nicolas Tertrais, consultor asociado de la consultora Advisia RH.

7 Usando tu celular

El teléfono celular no tiene por qué estar encendido durante una entrevista. Debes estar 100% disponible para tu interlocutor . Nada es más molesto que responder a una llamada en medio de una discusión. Es una falta de buenos modales y el reclutador no te perdonará.

8 Masticar chicle

Al igual que el teléfono celular, el chicle es muy mal recibido. Masticar o comer cualquier alimento es un comportamiento irrespetuoso . Tenga en cuenta que esto puede acabar con los mejores solicitantes. Algunos reclutadores lo odian particularmente.

9 Estar desplomado en su asiento.

Quizás el comportamiento más revelador para un profesional de recursos humanos es cómo sentarse. Hay mil una posiciones para sentarse. Stéphane Pille ha elegido el más adecuado:

• Párate derecho
• Estar encajado en tu silla
• Gire a la derecha en la cara
• No cruces las piernas
• Coloque las manos sobre los muslos

Olvídate de estar encorvado, de lado, desplomado o en el borde de la silla. Todos reflejan una actitud casual ”, continúa el director de ventas.

10 Todos los gestos de ansiedad

Por supuesto, una entrevista de trabajo siempre es estresante. Intenta identificar qué gestos suelen delatar tu ansiedad, así podrás evitarlos mejor:

• Sin saber donde poner tus manos
• Muerde tu labio
• Jugando con un bolígrafo
• Mordisquear un objeto
• Toque la mesa o el reposabrazos
• Enojarse
• Rascarse
• Acariciar el cabello o el muslo

Como sentarse en una entrevista

Nuevamente, tenga confianza. Debe pararse derecho, bien sentado en su silla. Evite apoyarse en el respaldo o sentarse sobre una nalga. Sea natural, por supuesto, puede cambiar de posición durante la entrevista, evitando gesticular … Generalmente, el reclutador le precederá a la sala e indicará su asiento. Si te da la opción, párate frente a él. Espere a que le invite a tomar asiento antes de sentarse.

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